Hoy entrevistamos al Licenciado Maximiliano González, en una entrevista muy interesante sobre Nuestra bendita columna.
¿Cuándo decimos esta bendita columna, cómo tenemos que cuidar nuestra columna?
Mira, realmente la columna es un tema porque al margen de ser una estructura muy importante, llena de músculos, ligamentos, articulaciones, para la persona, es un eje e influye también emocionalmente. Vos te podés lesionar el tobillo, las manos, los hombros y la gente no se preocupa tanto, pero la columna que al ser un eje importante y llena de estructuras, nos lleva a replantearnos un poco qué hacer, qué es lo que tengo que cuidarme, como lo tengo que hacer, si lo que estoy haciendo está bien o no, si hice un mal esfuerzo, si posturalmente estoy bien o no. Pasan 1000 cosas y lo vemos en consultorio. Por eso me parece que esto de la bendita columna es empezar a hablar un poquito y a calmar un poco las cosas.
¿Vos decís bueno lo que vemos en el consultorio, qué es lo que ven ustedes cotidianamente, que existe algún tipo de patología, cuáles son los problemas más frecuentes que puede tener una persona en su columna?
Mira, generalmente a nosotros nos consultan por postura, muchas veces creyendo que por ahí con alguna terapia van a mejorar la postura rápidamente, por dolor de columna lumbar principalmente. Hay veces que se irradia hacia la pierna, pero son muy pocas veces realmente en la zona lumbar. Nos consultan también por dolor de cabeza, mareos, problemas cervicales. Bueno, ahí hay que ver un montón de cosas dentro de la que surgió la kinesiología integral, osteopática. Uno empieza a vincular distintos sistemas que pueden influir sobre la columna. La gente que cuando viene al consultorio, se le hace una anamnesis, se lo evalúa clínica y posturalmente. Ahí empezamos a ver un poco la historia.
Lo primero que hacemos es saber la historia de cada persona. No me gusta decir mucho paciente. Me gusta saber la historia de cada persona, en esa historia nos metemos no solamente en la problemática que es el dolor, sino también nos metemos en su historia de vida, en lo laboral y en lo emocional, en lo digestivo, cómo influye lo digestivo también en columna, como influye la parte respiratoria en columna, cómo influye la masticación en columna cervical, por ejemplo. Nos empezamos a meter en toda la historia de la persona, porque todo puede influir en mayor o menor medida. Una vez hacemos una evaluación funcional hacemos una anamnesis, pasamos a ver zonas de movilidad articular, partes neurálgicas a través de la terapia manual y ahí vamos viendo cómo se comporta el cuerpo y que es lo que va haciendo, que va pasando.
A nivel postural, como yo siempre digo, no es que veo la mala o buena postura porque eso no existe. Lo que veo son hábitos. Qué es lo que refleja la persona cuando está de frente, cuenta del perfil. Eso me dice un montón de la persona. Entonces, a través de eso, a través de una escucha activa a través de una comunicación activa, empezamos a ver por dónde perfilar, por dónde ir, cuál es el camino terapéutico y qué hacer. Siempre trabajo así, face to face, o sea, cara a cara, sin escritorio de por medio, que sea algo muy ameno, muy cordial, de que la gente pueda estar tranquila y distendida para que empiece a hablar, que empieza a comunicar lo que va pasando. Se le hace toda una anamnesis, una historia clínica para ver lo que está pasando y de ahí en más pasamos a todo lo que es una evolución de frente, de perfil. Todos los sectores, movilidad articular. Todo eso es observación, movilidad, grados de movilidad, palpación. Ver cuánta rigidez hay. Empezamos a movilizar determinados sectores, empezamos a hacer unos test ortopédicos. La pisada es tremendamente importante para la columna, así como la mano para la columna cervical, por ejemplo.
¿Por eso que cuando nosotros tenemos el Mouse, nos duele muchísimo después toda la espalda?
Se ha hecho un estudio en la cual se lo ha puesto a personas en una en una superficie inestable y lo primero que entra en acción para tratar de sostener el cuerpo es la zona lumbar, lo primero que entra en acción. Entonces si yo tengo un pie, que no está tan estable, que no es tan competente, lo primero que va a entrar en acción, tratar de controlar el sistema, es la zona lumbar. Por ejemplo, en lo que es miembro inferior. En la parte superior, la mano tiene mucha relación con los hombros. Entonces si vos no tenés una buena toma, fuerza de toma con las manos, los hombros por ahí pueden o la cervical, la zona escapular, puede entrar a tener problemas. Y empezamos con esta problemática de las tensiones de los dolores, de los mareos. Hay un montón de cosas que empiezan a suceder. Entonces tenemos que tener en cuenta que somos un sistema vinculante, somos un sistema integral que todo puede influir con todo. Entonces tenemos que estar atento a todo eso, ya no es la persona o el kinesiólogo que trata el hombro, o el que trata pie, sino hay que ver toda una estructura, toda una biología.
Nos dice un montón de cosas, la columna, y los que hacemos actividad física también hay que prestarle mucha atención porque está muy relacionado, tal vez con las rodillas con los que corren.
Sí, totalmente. Lo que es pie, rodilla, si yo tengo estable el pie, y tengo estable la cadera, la rodilla va a estar muy bien también. No va a tener tanto problema. Pero bueno, obviamente que hay problemática de rodilla específicas, pero los pies y la cadera, la movilidad de cadera y la estabilidad de los pies, influyen tremendamente sobre la rodilla y obviamente, si yo no tengo unas buenas piernas, bien estables, la columna también va a empezar a traer problemas.
¿Y qué ejercicios podemos hacer para fortalecer la columna?
Bien, me encanta lo que dijiste, lo de fortalecer. Porque yo siempre cuando viene una persona le pregunto, bueno, si tienes problemas de columna cervical, lumbar, ¿qué es lo que harías vos si fueras kinesiólogo? Y me dicen: “y masaje obviamente, calor, estiramiento, me tomo una pastilla si me duele”. Pero se olvidan de lo más importante, que es la fuerza. La fuerza es muy importante, nosotros somos una unidad biológica de tracción, de empujes, de ascenso y descenso. Necesita una estructura estable y eso lo va a generar la fuerza. Entonces yo te puedo hacer la mejor terapia del mundo, te puedo generar un montón de cosas a través de la terapia manual, pero si yo no mejoro la unidad biológica a través del ejercicio de fuerza, voy a tener problemas.
¿Eso con qué lo haces, con pesas?
Mira, yo siempre trato de ser ordenado, si yo tengo que analizar ejercicio de fuerza, yo tengo que trabajar la fuerza, puede ser gimnasio, puede ser pilates, puede ser funcional, puede ser el crossfit.
Si yo tengo que armar el otro punto importante que es la movilidad articular y ahí podemos hablar de yoga, de pilates también, de stretching, de ejercicios de movilidad específicos. Y por último, todo lo que es trabajo de flexibilidad y estiramiento, lo puedo generar yo a través de la casa. Obviamente que todo esto tiene que estar supervisado con un profesional que sepa guiarlo y que sepa gestionar las cargas, que es lo más importante. Otra cosa que parece muchas veces en los problemas de columna es que si hay un ejercicio o un movimiento que me hace doler, lo dejo de hacer. Y yo le digo al contrario, ejercicio que te haga doler, lo tenés que hacer. Me miran con los ojos abiertos, me dicen ¿cómo? Sí, pero gestionando las cargas. Vos tenés que lograr poder hacer ese movimiento que muchas veces lo haces en la vida diaria, pero trabajando luego a través de un profesional, gestionando las cargas. Si un movimiento es muy amplio y te hace doler, bueno, irá gestionando el movimiento, lo harás más lento, lo harás con un rango menor. Si vos ves que la carga es mucha, bueno bajar las cargas, vas a ir trabajando lento, gradual, progresivo.
Para cerrar, ¿cómo tenemos que cuidar nuestra columna?
Tengo 5 puntos que yo toco generalmente en consultorio es, obviamente es análisis clínico, la clínica tiene que estar bien porque cualquier problema de tiroides, de triglicéridos puede afectar todo un sistema. Y obviamente si yo no tengo un sistema digestivo, por ejemplo, que es competente y la estructura no va a tener una buena alimentación. Tenemos que ver bien la parte química, análisis clínicos de rutina. Desde la parte nutricional obviamente, al margen de la comida, los hábitos nutricionales son muy importantes, comer tranquilo, masticar muy bien, la alimentación que sea la adecuada, la ingesta de agua, que tiene mucha influencia a nivel de la columna. Si son hábitos psico cerebrales, como digo yo, es el descanso, las 7 a 9 horas de descanso. Yo te puedo decir fumá, obviamente no lo hagan, comé cualquier cosa, no hagas ejercicio, pero por favor, “descansa”.
Entre 7 y 8 horas hay que estar acostado, a la noche. Es lo que se aconseja, generalmente después de los 40, 7 horas está bien, antes, 8 a 9 horas sí o sí. Eso es fundamental y obviamente, para llegar al sueño tenemos que gestionarlo según el ritmo circadiano, es muy importante, es todo un mundo. Obviamente si hay alguna afectación emocional, consultar con un profesional, porque también impacta efectivamente sobre la columna, ejercicios y actividad física y el deporte. Son 3 condiciones diferentes, deporte es, digamos es mucho bienestar cerebral, pero no tanto físico. Exigencia por ahí al máximo, pero obviamente sociabiliza te agrada, te da una disciplina que una disciplina. Actividad física es lo no regulable por ejemplo salir a caminar, salir a pasear, subir la escalera en vez del ascensor, ir en bicicletas al laburo. Eso hay que trabajarlo sí o sí, hacerlo todos los días. Ejercicio físico, como te dije, fuerza como primera condición, movilidad articular, flexibilidad como segunda y tercera lo que vos quieras, siempre y cuando asesorado. Y por último la postura, no hay buenas ni malas posturas, lo que nosotros hacemos es gestionar la postura, gestionamos el tiempo en postura. Cada 15, 20 minutos hay que hacer micro variaciones. Eso es lo principal, no hay ni buena ni mala postura. Esos 5 puntos hay que trabajarlos ahí, donde creo que reside el bienestar de la columna.
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